De cuando comenzó mi transformación (Trans)

 

Hola a todos.  Me presento, soy Daniela, una chica trans de la CDMX. Tengo 23 años y casi dos de terapia de reemplazo hormonal. Esto me ha ayudado al crecimiento de mis caderas y nalgas, así como a favorecer el desarrollo de una piel más suave. Mis senos -a pesar de tener la forma decididamente femenina- aún son pequeños, pero por el momento no me disgusta, ya que pasó por una mujer delgada (que si lo soy) y atlética. Creo ser muy bonita de cara: tengo ojos grandes, nariz delgada y labios finos; mi cabello es abundante, y si bien no es lo largo que me gustaría, bien peinado luce increíble. Así soy al día de hoy y me gusta.

Como muchas, mi lugar en el mundo lo empecé a intuir desde mi adolescencia. No es que me gustara jugar con muñecas, ni cambiarles el pañal a bebés de plástico. Pero por algún motivo que aún ignoro, mi cuerpo no se desarrolló como el de mis compañeros. Y al cumplir la mayoría de edad, era más que evidente que había algo raro en mí: mis glúteos eran más grandes y redondos que los de los demás hombres. Había una curva que ya se formaba entre mi delgada cintura y las caderas que, si bien no eran como las que tengo hoy, si eran más prominentes incluso que las de algunas chicas de mi edad. Además, mi piel es blanca y lampiña y mi voz algo andrógina. Esto me causaba ya algunos conflictos: en la universidad solían tratarme como mujer, en la calle me gritaban piropos (algunos muy groseros) y en muchos sitios se sorprendían cuando mostraba mis credenciales y se mostraba el sexo masculino.

He de confesar que, cuando estaba más joven, esas confusiones me desagradaban. Pero con el paso del tiempo, entendí que posiblemente era el mundo quien estaba en lo correcto: yo tenía más el tipo de una chica.

Así que, un día en que no hubo clases en la Universidad (recién había iniciado mis estudios ahí), me infiltre al cuarto de mi mamá. Ella trabajaba todo el día, por lo que en la casa solo estábamos yo y mis encendidas dudas. Tomé de su cajón unas bragas cacheteras que hacía mucho que no se ponía, unas pantimedias, una falda corta y una blusa ligera. Un sujetador y unas zapatillas de tacón bajito completaron el vestuario que me pondría por vez primera. Entonces me desnudé por completo, y me fuí acomodando cada prenda. Ahí descubrí la maravillosa sensación de tener unos calzones diminutos pero cómodos, la suavidad de las telas y lo bien que me ajustaba todo. Antes de verme al espejo, solté mi cabello y lo peiné de la manera más femenina que se me ocurrió. Y entonces sucedió.

Lo que pude apreciar en la imagen reflejada era bellísimo: la falda daba un brinco en mi trasero y caía delicadamente en unas piernas largas y estilizadas. La blusa me quedaba ceñida y me hacía ver más delgada y linda. Y muy sexy. Y sensual. Mi cabello castaño hacía un magnífico marco a una cara que, aún sin gota de maquillaje, lucía bonita y agradable y todo lo que aparecía en ese reflejo gritaba al cielo que una hermosa muchacha habitaba ahí. Y entonces lloré, porque me di cuenta de que está era la imagen que estaba guardada en mi imaginación todo este tiempo. Porque descubrí que, a partir de esos momentos, mi vida estaría consagrada a reivindicar esta forma de ser, y que no me importaban más las consecuencias a fin de dejar vivir a Daniela e ir dejando en el olvido a quien, en un mal día, se le llamo Daniel...

Espero que les haya gustado este breve relato de mi vida. En los siguientes días iré comentando más al respecto y de la vez que me entregué a mi primer hombre

Mi primera vez de mujer (Relato Trans)

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Me volví bisexual en un trio con unos turistas

 

Esta historia empezó en una playa nudista en el caribe mexicano, en Playa del Carmen. Soy un tipo un poco musculoso de buen cuerpo, brazos anchos mi cintura esta delgada mis pectorales un poco grandes, piernas torneadas y gruesas, para rematar un culo redondo y parado.  

En años anteriores así lucía y me gustaba ir a ver a las turistas que llegaban a las playas nudistas del lugar, incluso conseguía trabajos temporales con el fin de poder verlas de cerca, me gustaba ver esos cabellos rubios, pelirrojos, castaños, etc y esos cuerpos altos (yo también soy alto mido 1.89 mts) y bien formados estar de espaldas en la blanca arena de las playas del lugar. Me gustaba ver cómo iban a nadar en las aguas turquesas con esos cuerpos desnudos y sensuales. 

Así un día conocí a una belleza europea, una sensual morena clara de color de ojos azules, lindo cabello negro y un voluptuoso cuerpo, además un rostro angelical... yo trabajaba de mesero en ese hotel nudista frente al mar. Me dejó impactado con su belleza y su cuerpo que estaba sentada en un camastro. No me contuve más y me acerque a preguntarle si deseaba algo de tomar o comer en ingles pensando era norteamericana y ella me respondió en ingles que no deseaba nada por el momento, además ella era holandesa. Me disculpe con ella por importunarla y me alejé de ella ya que me di cuenta que la incomodé al acercarme a su cuerpo desnudo.

Luego me alejé y seguí atendiendo a los demás turistas que estaban allá, disfrutando de ver a las mujeres que andaban desnudas por allá, por acá y de pronto aquella belleza holandesa se puso de pie y se fue directo al mar. 

Pasaron unas horas y esa belleza salió del mar y se dirigió al bar del hotel donde estaba atendiendo para pedir muy amablemente una bebida, así que le ofrecí una piña colada. Mientras se la preparaba le hice plática (en inglés obvio)  acerca de cómo había llegado hasta Playa del Carmen, y porqué estaba sola. Entonces me dijo que había llegado con su novio pero se habían peleado por lo que decidió salirse del cuarto de hotel donde estaban y él se había ido con rumbo desconocido.

Así estuvimos platicando mientras tomaba varios tragos de varias piñas coladas, creo que le serví como cuatro y nuestra platica se fue haciendo en que si tenía novia o familia y le dije que era soltero. Así platicamos de mis gustos por las chicas extranjeras, ella acerca de los tipos como yo que más o menos nos dedicamos al GYM entre otras cosas más personales como si me gustan las relaciones abiertas o las posiciones favoritas en el sexo, así estábamos entre risa y risa hasta que ella me dijo que si la acompañaba a su cuarto. Le decía que no bromeara con eso porque andaba trabajando así me volvió a insistir (creo que ya estaban haciendo efecto las piñas coladas), me preguntó que si no deseaba acariciar su cuerpo o sentir sus caricias, o bien sentir sus pechos en mi cara. Eso me puso a mil por lo que le terminé aceptando la invitación. 

Ella se dirigió a su cuarto y yo la seguí detrás muy de cerca, solo veía cómo se movía ese hermoso culo frente a mi. Su frondoso cuerpo lo pude contemplar desde cerca y así la seguí hasta llegar a su cuarto, ella me invitó a pasar y nos empezamos a besar una vez cerrada la puerta. Entre besos y caricias me fuí quitando la ropa hasta quedar desnudos y continuamos por varios minutos, se agachó para darme una buena chupada de polla hasta que subió la temperatura para dar paso a su cuarto donde ella duerme. 

Me recibió en posición de cuatro donde pude ver toda su hermosura, pude ver esa hermosa rajita y su rico culit0... no me contuve más y empecé a darle lengua por los dos con lo que ella empezó a gemir mucho y cada vez más alto por lo que entendí que lo estaba haciendo bien ya que ella lo disfrutaba, así ella me impulso a seguirlo haciendo al poner su mano en mi cabeza en señal clara de que no quería que saliera de allí hasta dejarla por completo satisfecha... mmmmmmm que bien sabía su néctar al sentirlo una y otra vez en mi lengua. 

Entonces me pidió que ya le hiciera la penetración con todo lo que tuviera, así que yo estaba a full, ya estaba muy caliente y no me aguanté más, le agarré sus hermosas cadera y empecé a penetrarla poco a poco y así empecé a darle de a perrito con las ganas que le traía por esa belleza que me había vislumbrado todo en la playa, así la estuve disfrutando con esa energía que me impulsaba a gozarla una y otra vez. 

Me veía en el espejo y solo admiraba como estaban unidos nuestros cuerpos en esa posición ya que solo se escuchaba el jadear de aquélla bellísima extranjera, me incliné encima de ella para besarle la espalda y con mis manos pasarlos abajo de la cintura para estimular su clítoris con mis dedos, así estaba durante varios minutos y en eso tuve la sensación de que estaba siendo observado desde la puerta de aquel cuarto incluso me detuve un poco y miré a ver hacia atrás pero no observé nada ... esa belleza me dijo que no me detuviera y continúe en lo mío acariciando y moviendo mis dedos para que ella se siguiera humedeciendo.

No sabía que iban a dar un vuelco las cosas...

De pronto aquella belleza me pidió que hiciéramos la posición del "misionero" y así cambiamos a esa posición, donde podía sentir más y más  su escultural cuerpo, podía sentir cómo se mojaba pero hubo un cambio en ella, ya que me empezó a tocar mis nalgas y masajear el ojo del cul0 poco a poco hasta meter un dedo, al principio lo sentí incómodo pero me fue gustando poco a poco hasta que ella pudo meter el dedo de en medio en mi culit0  y así nos quedamos con ella. De pronto me dijo te tengo una sorpresa, sólo quédate en esta posición. De pronto vi de reojo que entraba al cuarto un rubio de cuerpo musculoso y mucho más alto que yo, se colocó detrás de mí y paró su polla mientras le untaba lubricante, quise zafarme pero esa belleza me atrapó con sus piernas y brazos, mientras con sus manos abría mi rico culit0, un culit0 virgen a su disposición.

Aquél tipo paró su polla de unos 20 o 23 cm calculo yo, entonces la puso en la entrada de mi culit0 y sólo sentí como entraba algo grueso y caliente que al principio me causó dolor y me hizo dar un ligero grito en eso aquélla belleza me dio un beso en la boca para que se ahogara mi grito por lo que sólo quedó en un gemido, mientras aquél tipo ya había empezado a moverse poco a poco en mi culito, la belleza seguía abriendo mi culito para que entrara la polla completa de aquel tipo. Ese rubio dijo algo en holandés que no entendí ... la mujer me dijo que había dicho que "tengo un culit0 muy rico y apretadito"... sólo alcancé a decir "thank you", esa palabra hizo que aquel musculoso rubio empezara a bombearme con más fuerza... yo no sentía dolor sino un placer indescriptible. 

Entonces aquélla belleza se zafó de mi y se hizo a un lado sólo para masturbarse viéndonos a nosotros, yo estaba con la cara hacia abajo con mi cul0 parado y aguantando aquellas embestidas que me daba el rubio, mis nalgas aguantaban muy bien sus ritmos de la embestida de su polla grande y blanca así que me dejé envolver en esas nuevas sensaciones de estar con un hombre que me estaba estimulando muy bien mi próstata a través de mi culit0 apretado así empezamos a estar más unidos y yo entonces empecé a mover el cul0 de forma sensual para que entrara en diversas formas ese gran miembro que portaba aquel rubio entonces en esa posición de perrito que estábamos el se inclinó a darme placer con su mano en mi pene, me daba unas buenas masturbadas mientras me seguía penetrando, nunca me imaginé que podía darle satisfacción a un hombre con mi culit0. 

 

Entonces sentí que se estaba poniendo más y más gruesa aquélla polla, la polla luego luego escupió toda la leche que contenía, sentí que un líquido blanco recorría mi interior y entonces pude dejar escapar un gemido de placer y jadeos fuertes por haber sentido que tenía dentro de mi la leche caliente de un hombre por primera vez, mientras tanto la belleza que estaba cerca de nosotros masturbándose se empezó a venir a chorros y sus jadeos se hicieron bien intensos. Por ello yo sólo quedé tumbado boca arriba y le di unos ligeros masajes a mi pene y entonces también empezaron a saltar los chorros de mi miembro. Mientras que aquél rubio ya estaba otra vez encima de mí untando su miembro con mi miembro, así que en esa posición sólo levantó mis piernas para ponerlas en su hombro, en esa pose él acerco su polla blanca que se había vuelto a poner dura y de un empujón se introdujo de nuevo adentro de mi culito mojado.

Así empezó a darme otra vez mientras me besaba apasionadamente en mi cuello y boca, mientras no dejaba de moverse bien con su rica polla gruesa, así entonces empecé a escuchar que jadeaba de nuevo y realizó un grito de placer que retumbó en el cuarto, eso indicaba que otra vez se había venido adentro de mi culit0 por lo que mi hoyo se volvió a llenar de leche. Mientras aquella belleza nos dio un beso en la boca a cada uno de nosotros y chupar nuestros miembros de cada uno que todavía tenía restos de leche en la punta. 

Terminamos acariciando nuestros cuerpos y gracias a esa experiencia con los holandeses soy bisexual, Ahora de vez en cuando realizo encuentros bisexuales con parejas u otros hombres. 

Trio en una playa nudista, experiencia bisexual .

 

-Llevas un bañador muy pequeño. Así empezaba está historia bisexual caliente 

Me dijo mirándome descarada y directamente a la polla, siguiendo la linea de su mirada me di cuenta de por donde iban los derroteros. Tengo que admitir que yo me había fijado en él, en su cuerpo fibroso, en su bañador mínimo y en su sonrisa franca. Era casi una atracción entre los demás, en la playa sobresalía.

No seria el único que lo había mirado con lujuria pero probablemente si el mas parecido en edad y constitución. Sonriendo no me quedó mas remedio que responder:

-el tuyo no es mucho mas grande.

-Me gusta exponer lo mas que puedo al sol. Aún seria  mejor si pudiéramos exponer más.

-Aquí desde luego no se puede, las marujas nos crucificarían.

-¿ Y si buscamos algún lugar mas discreto?.

- Soy Mario, me dijo.

-Y yo Alex.

Preguntó. Al otro lado de unas rocas siguiendo la linea de la rompiente empezaba la zona nudista. Recogimos nuestras cosas casi con prisa y nos encaminamos hacia allá. Nada mas pasar las rocas donde no podían vernos desde ninguna de las dos zonas acerqué mi mano a su bañador.

-¿Puedo ayudarte?

- Aquí ya podemos quitárnoslos. Así que si quieres echarme una mano...

Yo ya me había sacado el mío por los pies y lo había tirado encima de mi mochila. Casi me sorprende una rubia madurita de pechos generosos que venía detrás de nosotros bajándose del tirantes de un escueto bañador con la polla de mi nuevo amigo en la mano. Tampoco me hubiera importado.

En vez de sorprenderse, lo que hizo fue echarle una buena ojeada a nuestros rabos desnudos, colgando entre nuestros muslos y sonrió. Despacio sin alejarse de nosotros termino de bajarse el bañador. Con deliberados movimientos sensuales, ondulantes terminó de descubrir su cuerpo. En ese recodo aislados del resto del mundo nos mirábamos unos a otros sin asombrarnos y empezando a sentir deseo.

Tres desconocidos compartiendo una intimidad mas profunda que con algunos de mis amigos. Sus pubis depilados, sus pieles bronceadas, sus cuerpos, nuestros cuerpos, el de los tres ya completamente desnudos, depilados, suaves, deseables. Por un segundo nos quedamos sin palabras pero la atracción entre nosotros era evidente, saltaban chispas en la caliente atmosfera.

Solo el sol dorado nos contemplaba mientras nos mirábamos los unos a los otros. Marta se acercó aún más a nosotros. Rompiendo el silencio, nos saludó:

- Hola chicos,  ¿vais a la zona nudista? a exhibir esos cuerpazos. Podríamos ir juntos, ponernos juntos. Soy Marta por cierto.

- Alex y Mario.

Por supuesto que aceptamos, incluso recogí sus cosas de la arena como un perfecto caballero y nos internamos en la exposición de carne en busca de un lugar tranquilo donde ponernos. Por el camino no perdíamos detalle, he de admitir que a pesar de la estupenda compañía se me iban los ojos detrás de algunos de los cuerpos dorándose en la arena.

Un poco alejados de los demás extendimos las toallas. Ella me propuso:

-¿Te pongo crema primero a tí?

- Me encantaría.

Aunque el chico no quería perder la presa y recibí un masaje a cuatro manos sobre mi piel. Estirado en la arena, boca arriba con mi polla apuntado al cielo las manos de ella subiendo por mis piernas y las de él bajando por mi pecho y vientre hasta juntarse en mis depilados huevos. Dos desconocidos metiéndome mano desnudo del todo, en público y bajo el sol. No se les daba nada mal, su masaje me estaba poniendo en órbita. Ellos a cuatro patas, perpendiculares a mi cuerpo no dejaban de sobarme.

Mis manos tampoco descansaban, la derecha en la polla y la izquierda en las generosas tetas que colgaban a mi lado,  pellizcando sus pezones con suavidad. Me hicieron ponerme boca abajo entre risas.

- ¡Girate!.

Y siguieron con la espalda, frotándomela con fuerza hasta llegar al culo al que ambos prestaron especial atención, no sé cual de ellos amasaba mis nalgas y de quien eran los dedos que hurgaban en mi ano, lubricados con el bronceador.

La polla apretada entre mi vientre y la arena, durísima, me dolía por las ganas de correrme y el placer que sentía. Pero era agradable seguir excitado, muy cachondo.

Como venganza lo elegí a él para ser el siguiente, dejando que ella se cocinara a fuego lento manoseando a dos chicos jóvenes. Esperando su turno.

Entre los dos sobamos su piel, todo su cuerpo excitándolo todo lo posible, tanto como me habían excitado a mí.  Hasta conseguir agarrar su durísima polla, Marta entre tanto le tenía cogidos los huevos y se la amasaba como si quisiera quedarse con ellos y llevárselos en su bolso. A su vez él, mientras tanto, tenía uno de sus dedos juguetón que se perdía entre mis nalgas, en mi ano y la otra entre los largos y poderosos muslos de nuestra amiga. Yo se la había dejado a punto,  mis dedos aún olían a sus jugos y al poco de que Mario se dedicara a masturbarla ella se corría apoyada en mi vientre.

Pero al darse la vuelta ayudé a la madurita a tumbarse en la toalla entre nosotros. Extendí un buen chorro de crema en sus tetas para sobarlas a placer rozando mis manos con las de él que tampoco quería perderse ese gustazo amasando las dos generosas masas de carne. Sus tetas enormes nos permitían acariciarlos casi sin estorbarnos pellizcando sus pezones con suavidad para darle placer.

Por encima del cuerpo de Marta nos mirábamos a los ojos y nos dimos el primer beso, suave apenas rozando nuestros labios. Al vernos ella nos dijo:

- Yo también quiero.

Nos inclinamos sobre su cabeza juntando la tres bocas. La cosa enseguida se volvió lasciva, No se cual de los dos sacó primero la lengua pero al notar una de ellas buscando la mía enseguida separé mis labios y empecé a darles saliva a los dos.

Ella tampoco paraba quieta y como antes nosotros estiró los brazos y nos agarró las dos pollas cada una con una mano y siguió masturbándonos despacio. Sin abandonar los pechos con una mano deslizamos la otra bajando por su vientre. Bueno era voluptuosa así que no era plano del todo pero delicioso. Llegué tarde al ombligo donde estaba la mano de mi amigo acariciándolo así que pasé de largo mas abajo entre sus muslos en busca de la depilada vulva.

Al pasar el índice entre sus labios descubrí que estaba encharcada. Ya se había corrido al menos una vez. Sus labios hinchados rojos calientes y al tocar el clítoris se le escapó un gemido y aceleró el ritmo de sus manos. Le clavé un dedo en el coño penetrándola. Pronto se me unió mi amigo y terminamos follándola con dos dedos cada uno. Su coñito los recibía agradecido. Llevándola a un segundo orgasmo igual que ella lo hacia con nosotros.

El aumento de volumen de de sus suspiros y gemidos y las contracciones de la vulva apretando nuestros dedos nos indicaba que se acercaba su corrida y con él la nuestra. Ambos nos corrimos a la vez aplicando su vientre y sus tetas incluso los muslos del otro con nuestro semen. Tan calientes estábamos que fue algo explosivo. Lo extendimos con las manos por su suave epidermis como si fuera mas bronceador intentando disimular un poco por si alguien nos había visto.

Hasta que Marta se incorporó un poco girándose y se lanzó a comer la polla de mi amigo lamiendo los restos de su semen y las salpicaduras del mío en su pubis, muslos y vientre. Eso ya no se podía esconder, si alguien nos miraba de daría cuenta de lo que hacíamos. Aunque en aquella parte de la playa eso no le importaba a nadie o por lo menos lo que sentirían sería envidia.

Su giro me dejaba sus poderosas nalgas muy a mano para poder acariciarlas y amasarlas. Incluso para poder deslizar un dedo por su raja hasta encontrar el ano.

Yo me incliné sobre ella, lamiendo su pubis,  chupando su coño y la lefa de ambos que había caído por allí. Me lo facilitó separando sus fuertes piernas y yo poniéndome entre sus poderosos muslos. Dejé que el se agachara sobre mi cabeza para besarnos cuando yo conseguía separar la lengua de la encharcados labios de su vulva.

Mi polla necesitaba atención. Y viendo que ya todo aquello era imparable. Sabiendo que la gente que teníamos cerca o no nos prestaba atención o estaba ocupada en similares manejos decidí que podíamos disfrutar sin más preocupaciones. Sin quitar su nabo de la boca de ella Mario buscaba el mío con la suya. tirando de mi cuerpo para que se la acercara. Así quedamos formando una especie de triángulo cada uno con la boca ocupada en dar placer a uno de los otros dos.  Pronto, como yo hacia lamiendo los restos de semen sobre la piel de Marta mi piel recibía la lengua de Alex en una rueda de lamidas y placer.

Seguimos comiéndonos los unos a los otros hasta que nuestras pollas volvieron a ponerse duras sin importar que la poca gente que había en la zona nos viera. Sé que yo conseguí arrancarle a nuestra madurita por lo menos otro orgasmo antes de separar la lengua de su chochito.

Nos planteamos ir al mar a lavarnos y refrescarnos un poco. Pero ninguno de los tres tenía esa intención pues bajábamos por la arena con las pollas duras y una calentura de campeonato. Marta tenía una idea muy clara quería una doble penetración, era la primera vez que disponía de dos pollas para ella. Según caminábamos nos lo decía:

- Os quiero a la dos a la vez Alex por delante y Mario por detrás.

Desde luego yo estaba loco por follármela, o él o el primer agujero que pillara. Así que en cuanto llegamos a una zona que cubría lo suficiente para disimular un poco ella se subió en mis brazos. Rodeó mi cintura con sus muslos y dejó que mi duro rabo buscara el camino a su caliente interior prácticamente solo. Con un poco de ayuda, noté la mano de Mario agarrándo y guiándo mi glande entre sus labios. Enseguida él se nos abrazó por detrás de Marta y su pene enseguida encontró el camino al ano de la chica. No tardamos en sincronizarnos, ella subía y bajaba en nuestros brazos clavándose cada vez nuestros falos.

A la vez que notaba sus poderosas tetas en mi pecho y las manos de Mario en mi espalda sujetándome y acariciando, la mía recorrían sus pieles y en mi polla notaba el calor de su coño. Al oído muy suave me dijo:

- correte dentro.

Aunque Mario lo hizo antes que yo en su culo yo no tardé mucho más en llenarle su vulva con mi semen. Ella ya se había corrido varias veces entre los dos. Ahora sí que dejamos que el agua se llevara las pruebas de nuestra pasión.

Nos quedamos un rato mas en la arena disfrutando del sol y de suaves caricias a nuestros cuerpos con la excusa del bronceador o sin ella. Pero seguíamos deseando más de la los demás, yo si menos me había quedado con ganas de más de Mario y Marta de vernos a la dos juntos en acción.

Así que decidimos seguir la pequeña orgía. Por fin subimos a continuar la fiesta en la habitación de hotel de ella.

Una vez allí. Marta nos dijo:

- Chicos, quiero ver follándose entre ustedes!

Así que ni tardo ni perezoso Mario me tumbo en la cama y me puso de cuatro para empezar a lamerme el cul0, en esa posición  me dejó para darme lengua con muy buena técnica. Mientras Marta se tocaba la concha con las manos y se estimulaba mucho.

Entonces me puso su gran pene en la boca del cul0 para comenzar a frotarlo y enseguida me lo introdujo todo, con un empujón que me llegó hondo sentí muy caliente que me había entrado y sentí como se expandía mi culit0 apretado.

Entonces empezó a bombear con fuerza que me empezó a excitar demasiado y mi polla empezó a estar dura otra vez, y me dispuse a disfrutar más abriendo mi culit0. Marta empezaba a sacar chorros de su vagina con el grado de excitación alcanzado. En esa posición de perrito estaba bien empinado y con las piernas abiertas mientras la polla de mi follador seguía entrando y saliendo una y otra vez. 

Mario no aguanto mucho y me dejó correr en las nalgas toda su leche que se había sacado con mi culit0 apretado mientras tanto Marta ya se había acercado para chupar la polla de Mario y untar todo el semen caído en mis nalgas y espalda. 

Así terminaba mi experiencia de la ida a aquélla playa nudista. 

CREDITOS: A quien corresponda. 

Orgía entre mi hijo adolescente y tres invasores mulatos.

 

Jessie era un padre de familia divorciado que descubrió ser gay de closet, su divorcio con Marcia fue doloroso y problemático pero al mismo tiempo alegre porque se quedo a cargo de su hijo adolescente Paul, entre los dos descubrieron una extraña afición y fetiches de vestirse con brassiers, ligueros, stockings, medias, tacones, maquillaje entre otros, Jessie tiene 42 años y Paul 18.

Un día sin querer Jessie entro sorpresivamente al cuarto de Paul y lo descubrió vestido con brassier, medias, hilo dental, maquillado y con tacones. Fue tan sorpresivo que no tuvo tiempo de ocultarse y negarlo, en lugar de reprenderlo habló con él y le dio todo el apoyo y comprensión que necesitaba como adolescente. También se confesó delante de él acerca de sus preferencias sexuales ocultas por ello se hicieron más unidos a partir de ese incidente.

Todos los días platicaban a partir de ese gusto que tenían, Jessie aprendió mucho mas acerca del maquillaje, el vestido, el porte, así como la ropa intima de mujer, con el paso de los meses entonces decidieron dar un paso más aparte de vestirse con la lencería femenina y compraron juguetes sexuales que les ayudaran a estimular sus ricos y apretados anos con butt-plugs, vibradores, consoladores, entre otros.

La situación cambio en su zona de residencia al correrse el rumor de que había una banda de mulatos que asaltaba las casas por el rumbo y ya habían tenido algunos vecinos que habían sufrido esa experiencia.

Una noche mientras padre e hijo veían sus películas para adultos y se estimulaban sus ricos anos con sus consoladores, no se dieron cuenta que eran observados desde la ventana grande de su casa que estaba abierta, eran 3 mulatos que estaban igual masturbándose mientras veían lo que hacían el padre e hijo. Por eso solo decidieron observar a ver lo que estaba pasando. 

Padre e hijo se encontraban desnudos en cuatro estimulándose con los consoladores que tenían a la mano, mientras en la TV tenían puesto una película nop0r. Pasaron varios minutos y entonces el líder de los mulatos dio la orden de entrar uno por la ventana y los otros dos por las puertas. Cuando entro el mulato mas corpulento por la ventana tanto Jessie como Paul empezaron a correr hacia las puertas de enfrente y atrás, pero más tarde que temprano fueron sometidos por los otros dos mulatos mucho mas esbeltos y jóvenes .

Ambos fueron llevados a la recámara donde estaban. Los mulatos cerraron todas las puertas y ventanas de la casa. Entonces les preguntaban con insultos e humillaciones que si deseaban ver realidad sus fantasías secretas de sexo interracial que era lo que estaban viendo en la TV,  las escenas de mulatos dotados follando con sus pollas a blancos pasivos era un disfrute para los asaltantes. "¿Eso quieres que te hagamos?"... "¿Quieres sentir una polla negra en ese cul0?"... ¿Te gusta ser penetrado por otros hombres?"... ¿Eres una perrita adoradora de pollas negras". Entre otros comentarios humillantes. Para después que los mulatos jóvenes empezaran a desnudarse mostrando sus largas y duras pollas en todo su esplendor que hizo que Jessie y Paul suspirarán al ver el tamaño de las pollas mostradas. 

 

Entonces decidieron empezar con la acción interracial, el mulato más corpulento quito toda su ropa y agarró a Jessie el padre y lo llevó a un sillón donde lo obligó a darle sexo oral al dirigir con su mano la cabeza hacía su larga y gruesa polla, el papá empezó a darle una buena chupada a esa polla grande que hizo que el mulato emitiera un gemido de placer al gozar cómo se la estaban chupando por Jessie, mientras se la chupaban le daban masajes a sus bolas con las manos a ver si provocaba una eyaculación. Entonces empezaron los otros dos a besar a su hijo Paul y masajearle el rico culo que tenía el joven. Entonces después de unos minutos los dos tipos mulatos llevaron a la cama a Paul y lo acostaron boca abajo, procedieron luego uno de ellos a darle lamidas en el culito rico y el otro le introdujo su polla negra en su boca, permitiendo que diera y recibiera placer. 

El que ya no aguantó tanta chupada fue el mulato mayor quien sin dudarlo hizo que el padre se sentará sobre su enorme polla que ya estaba muy caliente, Jessie emitió un gemido de placer al sentir le gran polla en su apretado culit0 entonces lo empezaron a bombear con mucha fuerza y su cul0 recibía con gran satisfacción toda la polla enorme que tenía aquel asaltante, a su ves el mulato grande estaba disfrutando mucho, el culo de Jessie le daba bastante placer. En un momento se zafó de él y dijo "Espera, déjame ponerle lubricante... quiero disfrutarte más". Así lo hizo el mulato echó encima de su polla bastante lubricante que tenían en la habitación el padre y el hijo, por lo que una vez bañada su polla con el lubricante le pidió a Jessie que se pusiera "de perrito" encima del sofá. Así lo hizo entonces el padre parando su bonito culo rosado preparado para recibir al gran mulato. Esta vez fue más generoso al darle una suave penetrada para sentir de nuevo su hermoso y apretado culo . Los gemidos de los dos al mismo tiempo se empezaron a escuchar. 

Mientras tanto a Paul lo habían puesto en cuatro igual y uno de los mulatos jóvenes empezó a untarse lubricante en su polla por lo que Paul es pero con su culit0 parado para recibir la polla dotada de aquel mulato, sin embargo solo recibió una feroz penetrada que lo hizo gemir de dolor y el otro mulato entonces le dio un beso en la boca para ahogar el grito de Paul por recibir la polla grande de su compañero. El mulato que tenía metida su gran polla en el culito del hijo solo lo dejó inmóvil un ratito mientras veía que su polla entró casi toda dentro del hoyo apretado de Paul. Casi enseguida empezó a moverse poco a poco, un poco más rápido y más fuerte hasta que el ritmo empezó a endurecerse con las penetradas ricas que le daban por el mulato joven. El otro mientras tanto hizo que le chuparan la polla de nuevo para seguir gozando de la boquita sensual de Paul. Así estuvieron un gran rato un mulato disfrutando la polla dentro de su culo y el otro moviendo su polla dentro de su boca.

En tanto entre el padre y el mulato mayor, las penetradas ya habían sido subidas de fuerzas, las penetradas se hicieron más rudas y duras dando placer al cul0 bien apretado en ese posición para que sintiera que era ser penetrado por mulatos de pollas grandes tal y como estaban viendo en la película que tenían en la TV, la cual no había terminado y seguía con su transmisión de escenas hardcore de sexo interracial gay, así entonces empezaron a gozar más y más ambos. Porque ya se habían compenetrado en la posición en la que estaban y gozaban ambos de lo que estaban haciendo. El mulato por penetrar rico a Jessie y Jessie por soportar cada embestida con su grandioso culo.

De repente Paul empezó a gritar con placer "más...más...más...más..." mientras recibía las penetraciones duras de su mulato. "Ahora te daremos más" dijo uno de los mulatos mientras se ponía boca abajo y mostraba su polla erecta donde fue obligado a sentarse Paul con su culito rosado, ese sentón lo hizo gemir de placer y entonces el otro mulato lo obligo a inclinarse más y parar un poco su culit0 por lo que su siguiente paso fue igual tratar de meter su polla para que el joven hijo recibiera dos miembros dotados en su rosado cul0, el placer por recibir las dos pollas hizo que los miembros entraran perfectamente en su apretado hoyo, así que Paul sólo apretó los labios y decidió aguantarse el dolor para dar paso al placer. "Ahora si pide más" dijo uno de los mulatos. 

El cuarto se lleno de la voz de Paul que decía "Más...más... más... así...no paren... no dejen de penetrarme... Mmmmmmmmm". 

Los minutos y las horas pasaron hasta que la leche caliente salió de las pollas de los mulatos primero dentro del culo de Jessie que recibió con un prolongado gemido que le dejaba sentir esos chorros de semen adentro. El mulato mayor se retiro y dejó el culo del padre lleno de leche y con una buena abertura que le había dejado su polla. Mientras que el hijo también sintió los chorros de leche dentro de su rosado cul0, las dos pollas le dejaron mientras gritaban y daban jadeos al sentir que expulsaban su leche dentro del estupendo hoyo apretado de Paul. Tanto Jessie como su hijo decidieron seguir premiando a sus folladores al limpiarles con su boca sus largos y duras pollas que recién habían sacado mucha leche. Las bocas del padre e hijo hicieron bien su trabajo de darle una buena limpieza de la punta de la polla hasta las bolas y algún otro espacio donde hubiera un poco de leche todavía.

"Bien... entonces ya saben que se siente tener pollas negras adentro del culo" dijo el mulato mayor. "Es hora de llevarnos algo de valor de su casa" Añadió. "Llévense lo que quieran pero volvamos a follar" dijo Paul. "Siiiiiiiiii, por favor" dijo Jessie... "Eso será otro día... pero tengan por seguro que vamos a volver a disfrutar juntos" dijo el mulato mayor antes de irse junto con sus compañeros. 

El Club de los solterones calientes.

 

Un hombre casado es invitado por un amigo al club de los solterones, y como su esposa se encuentra en casa de su hermana él decide ir, para luego darse cuenta de que le encantó ser el centro de atención de todos los tres miembros del club..

El Club de los solterones calientes.

Todo comenzó, una noche, que estando solo en casa, ya que mi mujer se encontraba acompañando a su hermana menor que estaba por dar a luz.

Me llamó un viejo amigo mío, y sabiendo que me encontraba solo, me invitó, a lo que él llamó el club de los solterones calientes.

Al principio nada más le recordé que yo era casado, y por lo tanto no era solterón como él, y el resto de sus socios, pero mi amigo me dijo que el nombre era tan solo una excusa para reunirse, beber un poco y pasarla bien, y que en realidad no todos miembros del club eran solteros.

Me dirigí a su casa y al llegar, me dijo. “Bienvenido a la casa club de los solterones calientes.” aparte de mi amigo, se encontraban otros dos tipos, a lo que no conocía, mi amigo me los presentó y me comentó que al igual que yo uno de ellos también era casado.

Desde el inicio nuestro anfitrión se comportó espléndidamente, sirviéndonos huisqui del bueno, sin miramiento alguno, al principio de lo único que hablamos fue de la mala política del gobierno.

Pero al rato fuimos cambiando de temas, hasta que comenzamos a hablar sobre los hermosos culos de algunas mujeres famosas y no tan famosas, hasta que mi amigo nos propuso ver unas películas porno de España.

Como ninguno se opuso, yo tampoco lo hice para no ser aguafiestas, él prendió la tele, nos sirvió más bebida y nos preparó algo para comer.

Hasta esos momentos todo iba bien, quiero decir no me di cuenta de nada raro, pero me pareció que, uno de los amigos o socios de mi amigo, me estaba viendo de manera rara, pero no le di importancia, ya que yo estaba mucho más interesado en la película que en ellos.

Realmente perdí la cuenta de cuantas películas tenía dispuestas el dueño de la casa para que las viéramos, pero ya avanzada la noche, mientras nos él volvía a servir un buen trago de huisqui, propuso que si teníamos mucho calor que nos podíamos dar un baño en la piscina para refrescarnos.

Yo me sentí algo cortado, pero ante la insistencia de todos, y con la excusa de que debido al tremendo calor que se sentía, nos meteríamos a la piscina.

Terminé también quedándome en interiores, entre uno que otro trago, y los calientes comentarios sobre los videos que habíamos estado viendo, nuestro anfitrión nos invitó a que nos metiéramos en la piscina.

De eso a que nos pusiéramos a jugar como chiquillos en el agua, no tardó mucho tiempo, durante el juego, uno de ellos me bajó los interiores, hasta quitármelos, por lo que me quedé completamente desnudo, dentro del agua.

Quizás por lo bebido que me encontraba, no me preocupe por eso, pero el juego continuó, y fui yo quien le arrancó los interiores a mi amigo, y así hasta que los cuatro quedamos del todo desnudos.

Algo en ese momento me decía que debía marcharme, y cuando comencé a despedirme, los tres se me han tirado encima, haciéndome todo tipo de llaves como si fueran luchadores, al tiempo que me decían una y otra vez que no me preocupase, que me relajase.

Como era de esperarse, me molesté bastante al principio, pero de momento comencé a sentir que debajo del agua, uno de ellos tres había agarrado mi miembro, entre sus dedos, y casi de inmediato se lo había metido a su boca.

La verdad es que yo no me esperaba que sucediera algo así, pero al sentir la rica mamada que me estaba dando ese tipo, dejé de hacer resistencia.

Así que aun parcialmente metido en el agua, él continuó mamando mi verga, y a los pocos segundos sentí como un par de manos acariciaban mis nalgas, y que de momento mi amigo que me planta tremendo beso, en mi boca.

Yo no pude, o mejor dicho no quise que se detuvieran, y menos cuando comencé a sentir que el tipo que me acariciaba mis nalgas, suavemente comenzó a pasar su lengua por sobre mi esfínter, fue cuando me sentí realmente en la gloria, deje de pensar y solamente me concentré en disfrutar, de todo lo que ellos tres me estaban haciendo.

Estaba tan extasiado, por el placer que sentía cuando esa lengua me la introducían dentro de mis nalgas, que ni cuenta me di que me habían dejado de mamar mi verga.

Mi amigo dejó de besarme, e incorporándose ligeramente, colocó su miembro frente a mi boca, y quizás por lo borracho que me encontraba, y lo bien que me sentía a medida que el otro me pasaba su lengua por mi culo, que de momento me encontré mamando la verga de mi amigo.

A la lengua se sumaron varios dedos, y lejos de dolerme o incomodarme, los disfrutaba plenamente, hasta que, de momento, sentí como toda una verga me fue enterrada por completo dentro de mi culo.

Ya en esos momentos, poco me importó lo que me estaban haciendo, y hasta es más comencé a moverme como si yo fuera una puta profesional.

Así que, en cosa de pocos segundos, me tenían bien clavado por el culo y mamando verga. No bien mi amigo hubo terminado, viniéndose dentro de mi boca y prácticamente obligándome a tragar toda su leche.

Cuando el tercer tipo, el que comenzó a mamar mi verga, también coloco su verga dentro de mi boca al tiempo que se las arregló para a su vez mamar la mía.

El que me estuvieran dando por el culo, al tiempo que realizaba el tan famoso 69, me tenía tremendamente excitado, las embestidas que una tras otras les daba a mis nalgas me llegaban a lo más profundo de mi persona, y a pesar de dolor que pude haber sentido, disfrutaba de todo plenamente.

Hasta que me vine, y al que yo se la estaba mamando también se vino, mientras que el que me daba divinamente por el culo, continuaba metiendo y sacando su verga de entre mis nalgas, salvajemente hasta también venirse, pero sobre mis nalgas y parte de mi espalda.

Yo me quedé tirado sobre la orilla de la piscina, con mi culo al aire, por lo que cuando mi amigo se colocó tras de mí, no hice el menor esfuerzo por negarme.

Sentí que separó mis nalgas y casi de inmediato, volví a disfrutar del hecho de que me estuvieran dando por el culo nuevamente.

Cuando me desperté en la mañana, aun continuaba a la orilla de la piscina, pasando la resaca de la noche anterior.

En mi mente me preguntaba qué diablos había dejado yo que me hicieran, cuando sentí nuevamente a alguien acariciando mis nalgas.

Ya no estaba borracho, pero el solo tacto de esos dedos sobre la piel de mis nalgas fue más que suficiente, para que cuando sentí que me colocaron una verga sobre mi esfínter, prácticamente me la he tragado sin chistar.

Se trataba de mi amigo nuevamente, que fue a despertarme, y al ver mi culo tan provocativo como después me dijo, no pudo menos que volverme a meter su verga.

Hoy en día se puede decir que no hay oportunidad que desperdicie para que alguno de ellos tres me claven sus miembros, o yo les clave el mío divinamente, o me pongan a mamar.

RELATO PERSONAL:UN CUARTETO, CON MI NOVIO, Y DOS DESCONOCIDOS.

 

Que rollo raza, solo vengo a contarles una experiencia que me pasó el sabado en la noche.

MI PAREJA,estable y yo, decidimos salir a un bar, llegamos a uno de ambiente caro, (cabe decir que somos de cd juarez, pero no posteo esto en esa sección ya que esta bien muerta.) llegamos y empezamos a tomarnos unas caguamas. no había ni un puto lugar ya que llegamos alas 11:30 pm, y entonces vimos a un par de weyes ahí haciéndole al pendejo. les dije que si podíamos sentarnos ahí en su mesa, y dijeron que si, ya entrando en calor, me estaba poniendo ebrio y mi wey tambien., platicando entre nosotros, los desconocidos nos empezaron a sacar platica, nos preguntaron que si eramos novios, y se quedaron soprendidos, ya que como tipicos gays de ambiente, se les hizo raro que nos hablaramos de WEY, y que fueramos muy masculinos.

total quedo, que esos vatos andaban de viaje por aca por motivos de trabajo, y eran de Guadalajara, la noche se acababa rapido, alas 2 am, cierran todo aquí, y yo queria seguir la peda.

Convencí a mi wey, de seguir la peda con aquellos vatos, en el hotel donde se hospedaban y comprar cerveza clandestina.

Acordamos vernos alla en su hotel y y llegamos, empezamos a platicar de cosas gay, y nos dijeron que hacíamos buena pareja. Y que los dos teniamos buen cuerpo sobretodo yo que me notaron que tengo las nalgas paradas.

Mi wey y yo somos monógamos, pero el acohol nos desinhibió, estando ya muy ebrios y casi amaneciendo, nos acostamos en una cama, lo empecé a besar y a encuerarlo, los otros weyes se prendieron y tambien querían mamarnos las vergas, mi wey se calentó y los invitó a unirsenos y ya que solo me quería tocar a mi, pasó a empezar a manosear a los otros weyes que estaban con los pantalones y trusas abajo. 

Entonces sólo les agarramos las pollas y les sobábamos para que se calentaran más, ellos empezaron a lamerme el culo, así como picándoselo entre ellos, los desconocidos ya estaban bien calientes por lo que me empinaron entre los tres. Mi novio me penetró sin condón en mi culito apretado por lo que otro de los weyes me hizo que le empezara a chupar duro y rápido su enorme polla, el tercero me empezó a acariciar la espalda y el culo. Cuando mi novio sacaba su polla de mi culit0 entonces ese wey se lo chupaba para que siguiera dura su polla. Así estuvimos un rato hasta que mi novio pasó a que le diera unas ricas chupadas y otro de esos weyes se hizo cargo de satisfacer a mi culit0 apretado. 

Entonces mi novio se fue a darle por el cul0 a uno de ellos, el que me estaba penetrando siguió haciéndolo con más fuerza. Le dije a mi novio "NO te vengas adentro de él"... Y así continuamos durante la noche. Con un espejo que habia dentro del cuarto podía ver que la polla grande del que me estaba penetrando entraba y salía con facilidad. Me lo hizo de perrito, a horcajadas y de frente con mis piernas arriba de sus hombros. Mientras que veía que la polla grande de mi novio entraba en el culit0 de uno de esos weyes con mucha facilidad. Las penetradas se fueron intensificando más y más hasta que sonaban el choque de nuestros cuerpos muy fuerte.

Al final el wey de mi novio se vino en mi boca, y yo le avente mis mecos a uno de los otros weyes, un wey me la quizo dejar en el culo pero me dio  miedo y entonces ofrecí mi espalda, el otro me tiró encima de mis nalgas toda su leche la cual era mucha. 

Nos quedamos dormidos, y al dia siguiente nos despedimos y nos fuimos.

Estuvo bien pirata,el acohol fue el culpable de que nos dejemos llevar, lo volveríamos a repetir ahora con un mulato de por medio, pero dice mi wey que son mas pedo, ya que a veces se clavan y pueden ser un problema.

Tal vez en el futuro esto se repita, pero igual, solo vernos encuerados y sobarnos.

somos primerizos, pero fue excitante.

Comenten que opinan, que les pareció el relato si, les gusto. etc.

Chido saludos.